En el estado de Michoacán existen 3 santuarios declarados patrimonio de la humanidad y que se encuentran dentro de la Reserva de la Biosfera. En cada santuario se alberga un gran número de mariposas que han migrado desde Canadá y Estados Unidos para hibernar. Un dato muy particular y único de esta especie es que en su etapa adulta reproductiva vive entre cuatro y cinco semanas. Sin embargo, la mariposa monarca tiene la llamada “generación Matusalén”, que nace a finales del verano y no es igual a las que le preceden. A esta generación pertenecen las mariposas migratorias y se distinguen por vivir de siete a ocho semanas para llegar a su destino en México.
Uno de los mejores santuarios, pero también poco conocido es el que se encuentra en Senguio, Michoacán. Posteriormente se encuentran 2 de los santuarios más visitados; el Rosario, que se encuentra a pocos kilómetros del Pueblo Mágico de Agangeo, Michoacán y Sierra Chincua. Se puede acceder a cualquiera de ellos en auto, para después recorrer los hermosos senderos que este ambiente brinda.
Después de presenciar el espectáculo que la naturaleza nos brinda, recomendamos visitar el pueblo de cualquiera de las zonas alrededor para llevar a cabo más actividades, como escalar un muro, ir en tirolesa, o montar un caballo.
Al visitar estos puntos tan protegidos, se recomienda hacer caso y mantener los cuidados indicados por los guías turísticos para mantener y preservar la especie de mariposas, además de no afectar su reproducción afectando el ecosistema. Sin duda los santuarios de mariposas monarca son enigmáticos y son lugares especiales que te dejaran una experiencia enriquecedora con la naturaleza.